Con la participación de mil personas se realizó la marcha ‘A parar la impunidad’, convocada por la Coordinadora Nacional de Organizaciones de Derechos Humanos y Sociales, y que se planteó como una respuesta a una serie de señales en esta dirección del gobierno de Sebastián Piñera.

La manifestación que se inició en Plaza Baquedano y llegó hasta la Plaza de Armas, centró sus mensajes específicos en contra de la impunidad de los responsables de los crímenes perpetrados en Chile durante la dictadura cívico militar, además de reiterar la necesidad del cierre del penal Punta Peuco.

En la alocución final, Higinio Espergue, ex presidente del directorio de la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, manifestó la importancia de aglutinar a un gran movimiento social que impida la mantención de los pactos de impunidad y silencio, y presione por medidas urgentes de defensa de los derechos humanos, articulando un eje social que impida la repetición de los crímenes de la dictadura.

Por su parte, Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, sostuvo que «esta convocatoria es para condenar la negación de justicia, la actitud del Gobierno en cuanto a las violaciones de derechos humanos al dar indulto, pero también abarca las demandas de las feministas, junto a las demandas juveniles y sociales. No pasa solo por verdad y justicia por la dictadura. Se han cometido crímenes en estos 28 años de democracia».

Al la movilización se sumaron organizaciones sociales, de derechos humanos, sitios de memoria y agrupaciones sindicales, quienes expresaron con lienzos y consignas la importancia de detener los aspectos y acciones que favorecen y perpetúan la impunidad.