“Nuestra lucha tiene un solo objetivo: que la historia de horror que se vivió en estos lugares y en nuestro país no quede en el olvido, tal como lo desean muchos civiles y militares responsables de los atropellos a los derechos humanos”. Con estas palabras la Corporación 3 y 4 Álamos, un Parque por la Memoria y la Justicia dió la bienvenida a las y los asistentes al 7º Encuentro de ex prisioneros y ex prisioneras del campo de concentración, evento que se efectúa todos los veranos desde 2013.

En 1974 el ex seminario de la congregación Oblatos de María Inmaculada fue convertido en campo de concentración, donde la dictadura confinó más de seis mil personas en los tres años que fue usado para tal propósito. En su interior funcionaron dos secciones: 3 Álamos para prisioneros y prisioneras en libre plática, y los pabellones de aislamiento de 4 Álamos, destinados a personas traídas para su “recuperación” desde los cuarteles secretos de tortura. La gran mayoría de sobrevivientes de Villa Grimaldi fueron a parar al ex seminario oblato, manejado con mano de hierro por el coronel de Carabineros Conrado Pacheco.

Raúl Brito Castro, actual presidente de la Corporación 3 y 4 Álamos, destacó en su intervención los avances que ha tenido el proyecto de convertir todo el sitio en un espacio de memoria y educación, abierto a la comunidad. Partiendo por la declaratoria de monumento histórico de la casona del recinto, el patio de recepción de visitas y los pabellones de celdas. De esta forma se impidió al Servicio Nacional de Menores (SENAME), que actualmente ocupa los pabellones para confinamiento de menores infractores de ley, efectuar transformaciones que alteraran el lugar.

Sin embargo y pese a la declaratoria de monumento histórico, la Corporación no ha logrado rescatar y administrar el inmueble como sitio de memoria. La aspiración no ha logrado concretarse pese a la lucha de casi una década de los ex prisioneros y prisioneras. Brito fustigó a la burocracia estatal que ha impedido concretar la iniciativa, reiterando que “los ex prisioneros y prisioneras tenemos el legítimo derecho a administrar para la educación social y conciencia de Chile un lugar tan simbólico como 3 y 4 Álamos”.

El dirigente culminó su intervención efectuando un llamado a las diversas fuerzas políticas en el poder Legislativo para que apoyen iniciativas de rescate de la memoria histórica de este país y se exija al Estado el reconocimiento explícito de todos los lugares donde se torturó y asesinó opositores a la dictadura, asignándoles los recursos que se requieren para su trabajo.

Premiación

El momento más emotivo del acto fue la entrega de reconocimientos a personas y organizaciones destacadas en la defensa de los derechos humanos durante la dictadura cívico-militar. Desde hace un par de años la Corporación ha reconocido a diversas personalidad y a ciudadanos comunes y corrientes que efectuaron actos humanitarios en favor de las y los perseguidos por la dictadura.

En esta ocasión fueron distinguidos el abogado Jaime Castillo Velasco, ex presidente de la Comisión Chilena de Derechos Humanos, quien falleció en 2003; y la Congregación Oblatos de María Inmaculada por sus acciones de apoyo a las luchas sociales y acciones humanitarias a favor de los perseguidos durante la dictadura, las que le valieron persecusión hacia algunos de sus sacerdotes.

Especial emoción tuvo el reconocimiento entregado a Héctor Herrera Olguín, funcionario del Registro Civil, que en septiembre de 1973 identificó el cadáver acribillado de Víctor Jara, informó del hallazgo a su viuda Joan Jara y colaboró con ella en la recuperación del cuerpo y su sepultación. Herrera, que al momento de ocurrir estos hechos tenía apenas 19 años, visiblemente conmovido agradeció el reconocimiento y recordó esta circunstancia tan dolorosa, confesando que había cambiado su vida.

El acto culminó con los ex prisioneros y ex prisioneras interpretando el “Candombe para José”, tema que cantaban a coro tanto los hombres como las mujeres confinadas para darse ánimo, especialmente a los y las prisioneras encerrados en las celdas de aislamiento de 4 Álamos.