Con un acto, firma de convenios y la presentación de la obra ‘Quiero hablar sin imposiciones ni limitaciones’, la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi conmemoró los veintiún años de la apertura del sitio de memoria, erigido sobre las ruinas del ex cuartel Terranova de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA). La actividad evocó el 22 de marzo de 1997, día en que el mayor epicentro del terrorismo de Estado en Chile fue abierto a la ciudadanía como recinto de memoria y espacio de educación en derechos humanos.
La jornada se inició con las palabras del presidente del Directorio de la Corporación, Álvaro Ahumada, quien partió recordando “a todos y todas aquellas que no están con nosotros. A las 241 personas detenidas desaparecidas, ejecutadas y muertas por la tortura en este lugar, cuyos nombres están inscritos en forma perenne en el muro que forma parte de nuestro parque. A los 191 nombres de mujeres de nuestro Jardín de Rosas y que hoy asisten a este acto desde la memoria”.
Añadió Ahumada que en la actualidad Villa Grimaldi, “es un singular espacio patrimonial, transformado en un potente recurso pedagógico para difundir la memoria, combatir el olvido y la impunidad, y promover en el país una cultura de respeto a los derechos humanos”.
Concluyó manifestando que como Parque por la Paz “aspiramos a mucho, pero somos plenamente conscientes de nuestras limitaciones y de las dificultades que puedan provenir de escenarios que pueden debilitar la sostenibilidad de los sitios de memoria. Miramos con esperanza el porvenir, preocupados también del futuro de este sitio”.
En la oportunidad se firmaron dos acuerdos de colaboración con dos importantes instituciones. El primero fue con la Universidad de Chile, a través de la Vicerrectoría de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios, representada por el vicerrector del área, doctor Juan Cortés Araya. El foco del convenio, que fue destacado y relevado por el vicerrector, son visitas pedagógicas, actividades culturales y artísticas con alumnos de pregrado de la casa de estudios superiores. Cortés manifestó también la importancia para la universidad de un espacio que como señaló “mantiene viva la memoria”.
Doctor Juan Cortés Araya, vicerrector de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios de la Universidad de Chile
El segundo correspondió a un acuerdo que ya se encuentra operativo, de apoyo en temas de archivo y capacitación, con la Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas (FASIC), representada por su secretario ejecutivo Claudio González. Explicó que es un convenio que nos permite “ratificar, fortalecer y caminar más tiempo junto en todo esto, que es buscar la verdad, ya que como dice el evangelio, ‘solo la verdad nos hará libres’”.
Claudio González, secretario ejecutivo de FASIC y Álvaro Ahumada, presidente del directorio de Villa Grimaldi
La jornada concluyó con la representación de la obra ‘Quiero hablar sin imposiciones ni limitaciones’, del director italiano Giorgio Laveri, una performance teatral con testimonios audiovisuales, actores y música en vivo que aborda los hechos acontecidos luego de los golpes de Estado en Argentina y en Chile.
