Un emotivo acto de homenaje se realizó en recuerdo de Eulogio Fritz Monsalve, militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria, que el 21 de febrero de 1975 fue herido por disparos efectuadospor agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), cuando transitaba por calle Bascuñán Guerrero junto a otros militantes del MIR, siendo posteriormente trasladado hasta el ex cuartel Terranova (Villa Grimaldi), desde donde desapareció.
En el acto de homenaje, realizado en el Parque por la Paz Villa Grimaldi, se instaló una placa con su nombre y contó con la presencia de numerosos familiares y amigos de Eulogio, conocido como el ‘Duro Pablo’, quienes en su gran mayoría provenían de la ciudad de Concepción, ciudad en la que el homenajeado realizó gran parte de su actividad política.
A nombre del directorio de la Corporación Parque por la Paz habló Alejandro Núñez, quien señaló que “cada compañero que cayó en la lucha representa para los que sobrevivimos un deber, el deber de no olvidarlo y de rescatar su memoria y no para anclarnos en el pasado y en la nostalgia, sino para contribuir a iniciativas del presente y desarrollos futuros, más aún en estos tiempos de negacionismo e intentos de tergiversación de la historia”.
Carlos Fritz, hermano de Eulogio, señaló que “nosotros hacía años que estábamos esperando hacer una actividad por mi hermano y cuando tuvimos los primeros antecedentes de que a Eulogio lo habían traído a este lugar, por lo que pensamos que podía ser importante tener un lugar donde recordarlo, ya que físicamente no tenemos nada”. Por ello agrega, “que la posibilidad que nos entregó la Villa Grimaldi abriéndonos sus puertas fue muy importante porque con esto mi hermano va a quedar en la memoria del lugar en donde fue visto por última vez, no sabemos si con vida, pero estuvo acá y acá lo seguiremos recordando”
En el homenaje, hubo varias palabras recordando el compromiso, consecuencia y el bajo perfil que manejaba Eulogio, pese a ser uno de los dirigentes más importantes del MIR en Concepción.
Por ello, agrega Carlos Fritz, “nos ha costado mucho encontrar información sobre él…pero en esta actividad, cuando nos encontramos con un montón de compañeros y compañeras que llegaron a recordarle, para nosotros fue realmente emotivo; por ello, la lucha que él dió sigue presente y va a continuar en nuestros sobrinos y nietos que continúan en la lucha, porque la savia y la semilla que hemos sembrado continúa en un terreno fértil”.