Con manifiesta alegría, organizaciones que apoyaron la candidatura de José Aldunate S.J. al Premio Nacional de Derechos Humanos 2016, se hicieron presente hoy, en San Ignacio 1480, lugar donde reside actualmente el Padre Aldunate.
En un breve encuentro, representantes de la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, Red Laical y la Comunidad Ecuménica Martin Luther King, le manifestaron la importancia de ésta distinción, destacando el gran aporte entregado en la defensa de los derechos humanos y el tremendo legado de lucha por la justicia y búsqueda de la verdad que ha dejado a lo largo de su vida, sobretodo, para las nuevas generaciones.
En ese sentido, Patricio Véjar, representante de la Comunidad Ecuménica Martín Luther King, mencionó: “Sabemos que para Pepe, el tema del premio no es primordial. Nosotros estamos felices por este reconocimiento, pero creemos que el premio es una ocasión, una excusa, para insistir en instalar nuevamente, el tema de los derechos humanos en un momento en que se está legislando, “reformando”, y que vemos cómo el país se convulsiona, haciendo demandas legítimas y desde el Estado sólo hemos visto como respuesta, la represión y la insistente violación a los derechos humanos”. A su vez, Alberto Rodríguez, vicepresidente de Villa Grimaldi, recalcó: “Es importante destacar que Pepe nos ha dejado un legado tremendo. Más que un accionar político: la defensa de los derechos humanos, es un acto ético, tremendamente profundo. Nosotros, los familiares de víctimas de la represión, nos hemos sentido tremendamente acompañados por él y es por eso que tomamos la iniciativa, como organizaciones de derechos humanos, de convocar a la sociedad en su conjunto para que este premio sea una realidad y un reconocimiento verdadero a su labor incansable”.
A pesar de su avanzada edad (próximo a cumplir 99 años) y de su delicado estado de salud, Aldunate se vio contento de recibir, a quienes él considera “sus amigos de lucha”, y mientras le dedicaban algunas palabras, él expresó (para asombró de los presentes): “ojalá volvieran esos tiempos de lucha”.