El Festival Contracultural por la educación no sexista, efectuado el sábado recién pasado en el Teatro por la Vida de Villa Grimaldi, acogió una interesante muestra de iniciativas artísticas y experiencias de lucha contra la violencia sexista en la educación. En ese escenario, se destacó la participación del Colectivo Pedro Lemebel, integrado por chicos y chicas liceanas, quienes a través de provocadoras performances denuncian la educación opresiva e invisivilizadora de las identidades sexuales distintas que prima en el sistema educacional chileno.
El encuentro además, contempló un foro sobre educación, a cargo de representantes de la Fundación Transitar de Maipú, compuesta por familias de niños y niñas trans, de La Alzada – Acción Feminista Libertaria y del Preuniversitario Trans Mara Rita.
Para Gema Ortega, la primera expositora del foro y miembro de La Alzada, la esencia de una educación no sexista la constituye la construcción de una pedagogía feminista: “Un primer elemento en esta construcción, es el fortalecimiento de la diferencia en contra de la homogeneización de las personas. Un segundo elemento es cuestionar el lugar de poder de quienes enseñan o crean saber. El conocimiento debe ser fruto de un aporte entre distintas experiencias. Hay que crear nuevos saberes en el diálogo y subvertir los conocimientos establecidos colocando en la mesa nuestras propias experiencias, todas ellas desde la diferencia”.
Andy Co, Gema Ortega y Niki Raveau
A continuación intervino Andy Co, feminista transgénero, integrante del Preuniversitario Trans Mara Rita, llamado así en homenaje a la primera profesora trans de la Universidad de Chile. La iniciativa surgió como parte de un proyecto mayor, como es la lucha por conseguir ingresos especiales a la Universidad de Chile para la población trans travesti y activistas del mundo del feminismo. “No bastaba que el mundo heteronormativo nos dejara ingresar a sus salas de clase. No queremos estar expuestas al acoso, a la violencia, la lesbofobia o la transfobia, por tanto requeríamos una propuesta educativa propia, que considerara nuestras necesidades e intereses, que rompiera con la educación formal que busca domesticarnos para vivir en un mundo dirigido por hombres. Nuestro proyecto aboga por una educación no sexista desde y para los “otres”, un proyecto feminista, entre pares, donde todas las identidades se sientan respetadas y dignas en la sala de clases”.
Por su parte, Niki Raveau compartió con los asistentes el origen y los objetivos de la Fundación Transitar de Maipú, organización integrada por 35 familias con niños, niñas y jóvenes trans cuyas edades van desde los 4 a los 20 años. La organización busca incidir en el debate sobre políticas hacia la diversidad sexual y realiza una nutrida labor de educación, brindando talleres en salud y promoviendo actividades de encuentro entre jóvenes trans en distintos establecimientos de la comuna y en otros barrios populares de Santiago.
La Fundación también ha desarrollado talleres con estudiantes de pedagogía de la U. Alberto Hurtado, en torno a cómo enfrentar la situación de contar con algún alumno o alumna transgénero en el curso. Raveau señala al respecto: “en la mitad de los casos que conocemos la primera información de que un chico o chica es trans la recibe el profesor y lamentablemente muchos no saben qué hacer”. La entidad trata de colaborar a que el establecimiento incorpore la disidencia sexual, evitando trámites y certificados médicos. En este aspecto Transitar ha logrado hacer inclusión de niños y niñas trans sin necesidad de diagnósticos sicológicos, acompañando el proceso con capacitación que busca fortalecer la noción de que esta incorporación se relaciona con el ejercicio del derecho a la educación.
El foro concluyó con diversas preguntas de los asistentes, dejando instalados temas que merecen continuar desarrollándose en el debate público. La Corporación Villa Grimaldi, en su trabajo en derechos humanos está comprometida en constribuir, promocionar y difundir estas discusiones en torno a la lucha por los derechos de las disidencias sexuales.
Performance del Colectivo Pedro Lemebel
