El sábado 15 recién pasado, una pequeña caravana de vehículos, avanzó trabajosamente por el camino polvoriento que une Parral con el recinto de la ex Colonia Dignidad. No eran turistas de vacaciones, como quizá les habría gustado a los dueños del lugar, sino familiares, compañeros y amigos de detenidos desaparecidos y ejecutados políticos, cuyo rastro se pierde en las dependencias del enclave alemán. El recinto, dirigido con mano de hierro por el criminal Paul Shäfer, era el último eslabón de una cadena de cuarteles clandestinos de tortura y exterminio, quizá el más tenebroso de todos, donde se aplicaron los métodos de tortura más salvajes.
Shäfer ya no está. Su brazo derecho, el médico Harmutt Hopp se encuentra refugiado en Alemania y otros jerarcas han sido condenados a penas de cárcel. La Colonia Dignidad ahora se llama Villa Baviera y los alemanes iniciaron una serie de proyectos turísticos, buscando convertir el recinto en un resort , con alegres festivales al estilo bávaro, fiestas de la cerveza y bucólicas actividades en medio de sus bosques.
Sin embargo en este lugar se cometieron desde abusos a menores a crímenes de lesa humanidad sobre los cuales no se puede tejer un manto de olvido. Contra esa desmemoria avanzó en medio del polvo la caravana de familiares y activistas reclamando conocer todos secretos que esconde a Colonia Dignidad y exigiendo al Estado chileno, pero también al Estado Alemán su colaboración con la verdad y la justicia. Margarita Romero, ex presidenta de Villa Grimaldi y dirigente de la Mesa de trabajo sobre Colonia Dignidad, lo sintentizó de esta forma en su discurso leído en la actividad: “El gobierno chileno pero también el gobierno alemán, deben comprometerse con el esclarecimiento del oscuro pasado de este lugar, dejar de lado secretismos y hacer pública toda la documentación que existe al respecto. Abrir las cerca de 40 mil fichas encontradas en el enclave y cuyo contenido puede contribuir a esclarecer la verdad sobre los crímenes cometidos en Colonia Dignidad y otros lugares de exterminio.
El Estado debe proveer a la justicia de los medios necesarios para agotar todas las pistas que conduzcan a lugares de inhumación aún no investigados y profundizar la investigación de las fosas anteriormente encontradas, así como entregar información oficial y concreta respecto al hallazgo de osamentas encontradas recientemente en el predio de Bulnes.
También debe apoyar proyectos de reconstrucción de Memoria Histórica para que los visitantes que vengan a este lugar no lo hagan por el aspecto turístico que hoy ofrece, si no a conocer lo aquí sucedido, a recordar y homenajear a aquellos que aquí cayeron y a ejercitar la reflexión y el compromiso con UN NUNCA MAS».
INAUGURACIÓN DE MONOLITO EN MEMORIA DE LAS VÍCTIMAS DE LA COLONIA DIGNIDAD, SITUADO EN PUENTE SOBRE EL RIO PERQUILAUQUÉN
