Dentro de las actividades conmemorativas del Día Internacional de la Mujer, durante todo el mes de marzo se podrá visitar una muestra temporal en la que a través de un registro audiovisual, ocho mujeres que estuvieron detenidas en el ex cuartel Terranova -hoy Parque por la Paz Villa Grimaldi- viajan en el tiempo y recuerdan lo que aquí vivieron.
Los testimonios corresponde a Verónica León, Norma Matus, Haydée Oberreuter, Eva Palominos, Ángela Jeria, Marcia Scantlebury, Gladys Díaz y Ángeles Álvarez
Estos registros corresponden al trabajo que realiza el Archivo Oral del Parque por la Paz, cuya encargada, Daniela Bahamonde, se explaya en los objetivos de esta intervención. “Se trata del testimonio de ocho mujeres, ocho sobrevivientes que pasaron por la Villa y que testimoniaron en el archivo oral , compartiendo sus historias personales, sus experiencias y que creemos que son fundamentales para poner en valor esa memoria y revisibilizarlas.
Son ocho experiencias vitales que, intercaladas con algunos extractos del Informe Valech, se configuran y posicionan con la actualidad, porque sus testimonios no pueden ni deben perder vigencia.
“Yo creo que como mujeres todas hemos vivido situaciones complejas», señala Daniela Bahamonde, “y escuchar a estas mujeres que, pese a lo brutal de la experiencia continuaron con sus vidas, uno siente que ninguna de nosotras es impermeable, que no somos inmunes a estas situaciones y que por eso es importante colocarlo frente a la mirada de las mujeres, porque no podemos callar; no somos inmunes al dolor y una puede seguir con su vida pero esto no puede volver a pasar, menos si es desde el mismo Estado desde donde surge la agresión”
En este sentido, la profesional enfatiza que “en alguna medida, nos podemos proteger entre nosotras de ataques de personas individuales como un pololo o un pariente cercano, pero cuando el Estado te hace eso…¿cómo te puedes defender? ¿A quién le pides ayuda?..¿a otras fuerzas del Estado? Por eso es importante destacar estos testimonios dentro de cientos o miles de ellos que deben ser conocidos para la no repetición”.
Daniela Bahamonde puntualiza que “en la sala de la muestra se ha colocado un buzón y a un costado, hojas y lápices, para que quienes se sientan impulsados puedan escribir una carta con sus sensaciones frente a los testimonios. “Pensamos que cuando la gente se acerque a esta exposición y escuché los testimonios, tal vez les pueden surgir algunas interrogantes o algunas reflexiones y que quizás a estas mujeres les gustaría interactuar con esta intervención del pasado/presente. Entonces, sería interesante que si los visitantes tuvieran alguna reflexión, pregunta o comentario, lo escribieran y nosotros hacerles llegar esas cartas a estas ocho mujeres testimoniantes, lo que se puede hacer de manera anónima o con nombre”. “Hay total libertad para escribir -agrega la encargada del Archivo Oral- no es obligación, y con ello buscamos generar una reflexión no solo de las visitas, sino de las testimoniantes, en un ejercicio que no solo busca rescatar o recordar el pasado sino replantearnos el presente y mirar al futuro”.
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La muestra se exhibe en el Camarín de la Piscina de Villa Grimaldi; una pequeña construcción que sobrevivió a la demolición y fue posteriormente restaurado. En su interior se encuentra la pantalla y una urna donde depositar cartas o comentarios a las mujeres testimoniantes.
