Durante esta semana tuvimos la visita del curso de Gestión del Patrimonio de la carrera de Historia del Arte con mención en Restauración y Conservación de la Universidad SEK, a cargo de la académica, Sigal Meirovich, momento además, en que se desarrolla la 1º Bienal de Patrimonio en Santiago y se hace imprescindible discutir sobre la relación entre Patrimonio y memoria.

En esta ocasión, fue el Área de Museo el encargado de acompañar el recorrido por nuestro parque, sirviendo de una valiosa experiencia para los alumnos que concurrieron.

Desde el área de Comunicaciones pudimos conversar con la académica respecto de su mirada y reflexión sobre la gestión de la Corporación como sitio de memoria. Sigal Meirovich, es Historiadora del Arte y Magíster en Trabajo Social de la Pontífice Universidad Católica y actualmente cursa un doctorado en Sociología de la Universidad Alberto Hurtado.

Para comenzar, nos gustaría que nos contaras cuál es el objetivo de esta visita en términos académicos…

Sigal_MeirovichDesde este curso de Gestión del Patrimonio, mis expectativas son el poder mostrarle a los alumnos que el trabajo de gestión escapa de la mera gestión de las colecciones de los museos tradicionales; que hay formas nuevas de gestionar y que hay cada vez “nuevos patrimonios”, por ejemplo, sitios, patrimonio inmaterial y sobre todo, estos patrimonios que están todavía muy vivos, que se re significan constantemente. Por lo tanto, su gestión tiene que contemplar no solamente la preservación del objeto, sino que también, a sus comunidades, a las personas, a la memoria oral, etc.

En ese sentido, ¿Qué elementos destacas del Parque por la Paz y del trabajo de la Corporación en términos de gestión?

Bueno, dentro de la visita que tuvimos nosotros, me interesó mucho el poder mostrarle a los alumnos distintas etapas, no sólo de la gestión, si no que del sitio que se está observando. Porque uno observa una superficie, pero no siempre tiene la posibilidad de comprender bien que hay distintas capas; mirado de un modo arqueológico, es decir, del uso de los espacios, y en ese sentido, darse cuenta que existen también, distintas formas de trabajar un lugar.

También me pareció muy interesante en términos de gestión, poder ver que el Parque no ha quedado en su estado original, de cómo se desarrolló en primera instancia este proyecto arquitectónico, sino que se han ido incorporando nuevos elementos monumentales, nuevos elementos museográficos y también nuevos relatos dirigido a las diversas visitas. Eso me parece realmente muy interesante: el poder venir al parque a tener un espacio de comprensión de lo que es el Terrorismo de Estado, pero poder venir otro día a comprender cómo es la violencia contra la mujer, etc., y así encontrar distintos objetivos dentro del  mismo lugar.

¿Qué características reconoces en el Parque por la Paz en comparación con otros sitios de memoria que has visitado?

Bueno, a mi me parece muy importante que existan varios sitios gestionados de distinta manera, porque efectivamente, uno comprende la memoria desde los diversos relatos. Por un lado, es muy importante contar con un espacio de conmemoración, cuando existe un duelo inacabable; entonces, me gusta mucho observar que el parque provee de ese espacio de conmemoración, que a mi modo de ver, escapa a la conmemoración de las propias víctimas, sino que es capaz de ampliar su comunidad y su objetivo a todos los chilenos; porque somos todos los chilenos, víctimas de una u otra manera de lo que pasó y tener un espacio de conmemoración a diferencia de, por ejemplo, el Museo de la Memoria, que es un espacio construido con un relato oficial de lo que, políticamente Chile espera construir como memoria, es necesario y muy importante.

Por otro lado, creo que es importante que acá en el Parque, destaquen al inicio de las visitas, que son la primera experiencia latinoamericana, porque creo que es bueno saber que su proceso, también fue a partir de una especie de “ensayo-error” dentro de Latinoamérica; que fue el primer acercamiento con lo que conocemos como “sitio de memoria” y que uno, estando acá, puede hacer ese enlace y recorrido histórico, entendiendo por ejemplo, la propia transición que ha tenido Chile y pensar en una reconciliación posible, etc.

Por otro lado, es posible reflexionar también, a partir de los monumentos a los partidos políticos, que hay una identificación política de quienes pasaron por aquí, que fueron torturados, asesinados y desaparecidos y que e Terrorismo de Estado, fue aplicado fundamentalmente, a militantes y no civiles desvinculados políticamente.

Por último, la Sala de la Memoria, permite esa visibilidad más íntima y sensible, acercándonos a aquellos que pasaron por aquí, mostrándolos, desde sus objetos personales, como personas comunes y corrientes, que tenían vidas muy similar a nosotros. Para mí, ese sitio, hoy nos entrega la posibilidad de acercarnos a la memoria de tantas maneras diferentes y que como primera experiencia latinoamericana, ha sido también  referente para las otras.

visita_uni_sek01