Un seminario realizado en Brasil, organizado por la Universidad Federal Fluminense y el Ministerio de Derechos Humanos y Ciudadanía, convocó a sitios de memoria de Chile y Argentina para recopilar y aprender de experiencias consolidadas de otros países de la región para la implementación de un memorial en la «Ex Casa de la Muerte», ubicada en Petrópolis, Rio de Janeiro,
Este inmueble residencial pasó a ser conocido históricamente como “La Casa de la Muerte”, debido al funcionamiento que le dio la dictadura militar brasileña entre los años 1971 y 1974, como centro clandestino de detención y extermino, estimándose que al menos 30 presos políticos estuvieron ahí.
La participación chilena incluyó a Villa Grimaldi, José Domingo Cañas, Irán 3037 y Londres 38, cada uno exponiendo sobre su especialidad, desde la gestión institucional hasta la arqueología y la vinculación pasado-presente. Los debates centrales giraron en torno a las políticas públicas de memoria, contrastando la precariedad del modelo chileno —marcado por la ausencia de una ley específica y la entrega de sitios sin financiamiento— con el modelo argentino, donde el Estado contrata al personal, pero compromete la autonomía de los sitios.
Otros temas transversales fueron el preocupante avance del negacionismo, la importancia vital de los vínculos con las comunidades locales y el complejo contexto brasileño, caracterizado por un desarrollo más lento en la recuperación de sitios y enmarcado por un episodio de violencia extrema en Río de Janeiro que coincidió con el evento.

Aportes de los Sitios de Memoria Chilenos

Cada sitio de memoria chileno fue invitado a exponer en paneles temáticos específicos, compartiendo su experiencia y enfoque particular.
Villa Grimaldi centró su exposición en Gestión e Institucionalidad, realizando una presentación con una breve historia del sitio y un detallado análisis de su estructura orgánica: el funcionamiento de la Asamblea, el directorio, los equipos de trabajo y las comisiones internas, destacando su sólida institucionalidad, siendo el primer sitio recuperado en Chile.
José Domingo Cañas habló sobre Arqueología y Vestigios, centrándose en la «arqueología del sitio» y el tratamiento de los vestigios materiales, abordando las metodologías y decisiones sobre qué hacer con los restos físicos del lugar.
En tanto, Irán 3037 se refirió al Proceso de Recuperación mediante el cual se recuperó el sitio y la situación actual que enfrenta la organización, con un énfasis particular en los desafíos de sostenibilidad
Finalmente, Londres 38 se enfocó en las estrategias y trabajos que el sitio realiza para conectar la historia de las violaciones a los derechos humanos con problemáticas sociales y políticas contemporáneas.


Contingencias y negacionismo

El seminario abordó el negacionismo como un fenómeno social en ascenso en la región, discusión que se vio intensificada por el contexto de violencia en Brasil. En este sentido, se señaló la existencia de una percepción social que avala acciones violentas y extrajudiciales, donde mucha gente avala este tipo de acciones porque piensan “bueno, a veces es mejor que los maten porque merecen morir sin tener un juicio justo». Esta mentalidad fue vinculada directamente con el avance del negacionismo y el debilitamiento del respeto a los derechos humanos.
Cabe señalar que la llegada de los participantes al Seminario coincidió con una masacre en Río de Janeiro, donde aproximadamente 130 personas vinculadas a bandas criminales («Comando Vermelho») fueron asesinadas. El evento fue descrito como una «masacre» sin juicio previo, donde los cuerpos fueron arrojados o desaparecidos. Este suceso, que habría ocurrido mientras el presidente Lula no estaba en la ciudad, sirvió como un telón de fondo que permeó las conversaciones sobre derechos humanos, violencia estatal y la fragilidad de las garantías democráticas.


Finalmente, se destacó que un factor crucial para la vitalidad y relevancia de los sitios de memoria es el establecimiento de vínculos con las comunidades aledañas que permiten mantener estos espacios activos y que, más allá de las presentaciones individuales, el diálogo entre los participantes de Chile, Argentina y Brasil generó profundas reflexiones sobre los desafíos comunes y diferencias estructurales en la gestión de la memoria que cada país enfrenta.