A cuarenta y dos años del secuestro y posterior desaparición de tres jóvenes socialistas el año 1976 en la ciudad de Mendoza: Juan Hernández, Luis Muñoz y Manuel Tamayo, en una operación en conjunto de la Policía Federal Argentina y la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), se realizó un acto conmemorativo en el Parque por la Paz Villa Grimaldi, de uno de los casos más emblemáticos de la Operación Cóndor.

La actividad organizada por el Centro Verdad y Justicia, abordó como un aspecto central el recuerdo y el ejemplo de los viejos luchadores, como Juan, Manuel y Luis, para hacer frente a las condiciones del presente, y “no bajar los brazos, mantener la frente en alto, a reponerse de los golpes, a resolver nuestras debilidades y retomar el camino de la lucha por más democracia, más justicia social y pleno respeto a los derechos humanos”, como planteó en su intervención el vicepresidente de la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, Cristián Castillo.

Agregó Castillo que esta conmemoración evoca “una pérdida dolorosa, especialmente para sus familias, pero sin duda es un ejemplo de dignidad y esfuerzo que nos sigue animando desde la memoria a continuar la lucha por los viejos sueños de libertad y de una sociedad más justa e igualitaria”.

Por su parte, Karina Delfino, vicepresidenta de la Mujer, del Partido Socialista, indicó que este homenaje es un acto que nos debe permitir recuperar la memoria, y “contrarrestar opiniones como las del diputado (Ignacio) Urrutia, que nos agreden. Creemos que él no debería estar sentado en el parlamento, y que estos dichos evidencian que la derecha chilena no es un partido que contribuya a que seamos un país que avance hacia la verdad y la justicia”. La dirigente señaló que el recuerdo de Hernández, Muñoz y Tamayo, y el de otros militantes socialistas desaparecidos y ejecutados, debe servir a las actuales generaciones para comprender mejor el pasado, para poder hacer de Chile un país más justo y con mejores condiciones de vida.

La jornada incluyó un homenaje especial a Roberto Márquez, voz, compositor y director musical del grupo Illapu, y a través de él, el trabajo comprometido y solidario de más de cuarenta y cinco años de la agrupación, que enfrentó siete años de exilio y que ha expresado una preocupación consciente por las temáticas cotidianas y la política chilena. Márquez agradeció el reconocimiento, y manifestó que “uno está en esta labor para seguir luchando por lo que cree, por lo colectivo, y por lo que los Illapu siempre hemos vivido junto a nuestro pueblo, en sus distintos momentos y que hoy seguimos compartiendo”.

Finalmente Patricio Grez, del Centro Verdad y Justicia, manifestó que “el recuerdo de estos tres desaparecidos se nos hace más fuerte cuando vemos que reina la impunidad, y la falta de justicia en Chile, y que la corrupción cruza a distintas instituciones en el país”. Señaló finalmente que el escenario actual “nos llama a la unidad de los actores sociales, y a dar esta lucha por la dignidad, desde el movimiento social, con los jóvenes y en las calles, ya que está claro que los partidos políticos que alguna vez nos representaron no dan el ancho en esta etapa”.

En la actividad se homenajeó también a las hermanas Viviana y Victoria Díaz, de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos; a Ligia Gallegos Díaz, dirigenta del Colegio de Profesores; Ana González de Recabarren, activista de los derechos Humanos; a Karina Delfino, vicepresidenta de la Mujer del Partido Socialista, y a Juanita Palma, compañera de Roberto Márquez. La actividad consideró además la lectura poética de Mario Lorca, las interpretaciones musicales de los homenajeados Victoria Díaz y Roberto Márquez, y de la Estudiantina La Chimba.

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