Tal como otros sitios memoria en el país, la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi realizó una significativa actividad simbólica: colgó un lienzo en el frontis del recinto ayudados por estudiantes que asistieron a una visita guiada dirigida por el Área Educación.
La tortura es uno de los crímenes contra la humanidad tipificados por la jurisprudencia internacional y es inammistiable e imprescriptible. Sin embargo, en nuestro país existe poca conciencia de sus devastadores efectos que pueden llegar a desintegrar a una persona para el resto de sus días.
Por el centro de tortura y exterminio de Villa Grimaldi se estima pasaron 4.500 personas entre 1974 y 1978, de ellas 236 están desaparecidas o fueron ejecutadas.
La Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi que forma parte de la red de sitios de memoria de nuestro país y de la Coalición Internacional de Sitios de Conciencia se sumó este jueves 26 a la actividad con el objetivo de que estos hechos no vuelvan a repetirse en el país.
El área de educación mandó confeccionar un lienzo que se colocó en la fachada del recinto.
Lo significativo y especial en este caso es que fue colocado con la ayuda de un grupo de estudiantes de tercer año de Enseñanza Media del Colegio Cardenal Raúl Silva Henríquez de Viña del Mar.
Los jóvenes se habían levantado muy temprano en la mañana para realizar la visita y lo esperaba Bárbara Azcárraga quien realizó la visita guiada, que en esta oportunidad centró su énfasis en hacer pedagogía acerca de la conciencia que se debe tener sobre este delito, del cual – según palabras del Ministro de Justicia, José Antonio Gómez, también se cometen en democracia.
Los 60 alumnos que asistieron a la visita en el Día contra la Tortura fueron acompañados por sus profesores de historia Renán Astengo y Cinthia Peña junto a Jacqueline Pizarro de Biología.
El profesor Pizarro señaló que la visita “es muy importante para comprender las violaciones a los derechos humanos. La idea es que observen, escuchen y constaten y haya carne de lo que sucedió en Chile”.
“A ellos les cuesta dimensionar el valor concreto de lo que fue la violación a los derechos humanos. Venir a este espacio los conecta a un aspecto concreto de esas vulneraciones a la dignidad humana”, agregó.
“La idea es convertir la visita a Villa Grimaldi y al Museo de la Memoria como parte del circuito educativo anual permanente del Colegio», concluyó.