El próximo 29 de noviembre se conmemora el Día del Cine Chileno, efeméride establecida en recuerdo de Carmen Bueno y Jorge Muller, dos trabajadores del cine secuestrados por la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) el 29 de noviembre de 1974.

Nos imaginamos a la bella Carmen Bueno portando la claqueta de continuista y al guapo Jorge pegando su ojo al visor de la cámara. Suena el clack característico, anunciando la toma siguiente de este acto de memoria del cual ambos son los protagonistas.  

Jorge Hernán Müller Silva es uno de los mejores camarógrafos del país. Su ojo y arte de filmar se hace presente cada vez que alguien visiona  «La Batalla de Chile» o cualquier  producción donde colaboró. En los films como “A la Sombra del Sol» de Silvio Caiozzi y Pablo Perelman, en “La Tierra Prometida”, de Miguel Littin o en filmes de Raúl Ruiz como “La expropiación” y “El realismo socialista”. 

El crítico Christian Ramírez lo califica de maestro del plano secuencia. Le bastaban tres primeros planos del personaje para definir su personalidad, destacando  la fragilidad, la pasión, el odio, la fe, el miedo y la frialdad visibles en los rostros retratados por su cámara.

Carmen Bueno Cifuentes conoce a Jorge filmando las duras escenas de “A la sombra del sol”.  Actriz y cineasta, se forma  en la Escuela de Artes de la Comunicación, de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Trabaja como asistente de producción en varios filmes, incluido el documental de Patricio Guzmán, “El Primer Año” (1972). También produce programas infantiles para la televisión. Durante el gobierno de la Unidad Popular desempeñó diversos roles en “La Tierra Prometida» (1973), de Miguel Littin, trabajando como productora, cocinera, actriz y vestuarista. Al año siguiente se va al norte de Chile con Silvio Caiozzi y Pablo Perelman a filmar “A la sombra del sol”.

El 28 de noviembre de 1974, Carmen y Jorge asisten al estreno de la película de Caiozzi y Perelman. Sin duda es un suceso extraordinario en medio de las sombras que se habían abatido sobre el país. Luego del estreno celebraron con los amigos y se quedaron en la casa de uno de ellos para capear el toque de queda. Al día  siguiente salieron rumbo a sus trabajos en Chile Films pero nunca llegaron.

Nuestra imaginaria claqueta da un golpe seco, señal de paso a una nueva escena. Esta vez de horror, de violencia  inmisericorde, rodada en un restaurante exclusivo situado en medio de prados, árboles añosos, fuentes y esculturas. 

Se llamaba “Paraiso de Villa Grimaldi”, pero la maquinaria terrorista de la dictadura  lo bautizó como “Cuartel Terranova” y lo convirtió en un infierno para miles de chilenas y chilenos que pasaron por sus estrechas celdas de madera y salas de tortura.

Entre ellas y ellos, Jorge y Carmen. 

Testigos afirman que  Carmen estaba muy golpeada, con dolores en sus manos y en la vagina. Jorge también fue torturado brutalmente. 

En diciembre del 74 ambos fueron trasladados al recinto de incomunicación de  Cuatro Alamos. Quienes los reconocieron coinciden en declarar que Jorge y Carmen se comunicaban en este recinto por señas cuando las mujeres eran llevadas al baño. El 17 de diciembre fueron sorprendidos en estas comunicaciones y al día siguiente la pareja fue sacada de Cuatro Alamos con rumbo desconocido.

Carmen habría alcanzado a dejar su nombre rayado con un alfiler en la pared de la celda de incomunicación. En 1975 su nombre apareció en la infame lista de 119 prisioneros y prisioneras, que la DINA y la prensa de la dictadura pretendieron mostrar como asesinados por sus propios compañeros. De Jorge no hemos sabido mas, hasta el día de hoy.

La ausencia de ambos se hace notar. Hace falta el ojo y el pulso de Jorge y la creatividad, la alegría y extravagancia de Carmen. 

La claqueta da su sonido seco para la escena siguiente, con nosotros y nosotras como protagonistas, donde la memoria se suma y nos demanda  retomar la cámara de Jorge, la pizarra de Carmen, como símbolos de ese proyecto transformador en el cual ambos se comprometieron con entusiasmo juvenil, junto a todo un pueblo. 

Esta escena sigue rodándose.

LFA 11/2021